Charro de las Calaveras, El

El Charro de las Calaveras (El Charro de las Calaveras, 1965, México)
Dirección: Alfredo Salazar
Guión: Alfredo Salazar
Género: Héroes enmascarados en su lucha diurna con los monstruos de la noche (que salen por la mañana)
Intérpretes: Dagoberto Rodríguez, Pascual García Peña, David Silva, Alicia Caro
Sinopsis: Las villas de México sufren el ataque indiscriminado de numerosos monstruos infernales, como el salvaje Lobo-humano, el sanguinario vampiro siniestro y el diabólico jinete sin cabeza. Las víctimas suelen ser los pobres campesinos que inocentemente pasaban por ahí, que sin comerlo ni beberlo son merendados por semejantes bichos. Pero que no cunda el pánico, que por el horizonte se divisa una figura enmascarada a caballo que con su valor, sus puños y unos cuantos plomazos, va a restaurar el orden en los campos de México.
¡¿Es el Zorro?!
¡¡NOOOOOOOOO!!
¡¿Es el Coyote?!
¡¡NOOOOOOOOO!!
¡¿Es Batman e Robin?!
¡¡Qué NOOOOOOOO!!
Entonces ¡¡¿Quién es, por amor de dios?!!
Es el superhéroe más valiente del mundo. Es...¡EL CHARRO DE LAS CALAVERAS!
po vale.

Muchos dirán que el país con los super-héroes más grandiosos del mundo es Estados Unidos, con Supermán, Spiderman, Batman y un millón más, pero de eso nada, pelanas. Los mejores superhéroes del planeta (y del universo) son Mejicanos, más que nada porque son héroes de carne y hueso, reales como la vida misma, que te podías acercar a ellos y pedirles un autógrafo. El primero de la lista es el mítico e inmortal Santo, el enmascarado de plata, héroe de la lucha libre y salvador del planeta en sus ratos libres. Pero desde luego no fue el único, ni mucho menos. Aquí tenemos a uno de los super-héroes más...ehh...singulares del panteón de superhombres mejicanos, que aunque a simple vista parece un pelín cutre, posee un innegable carisma. Influencia clara de los héroes clásico del pulp y del cómic tales como La Sombra, el Zorro o Batman, El Charro de las Calaveras es un fenómeno de super-héroe (aunque a veces ande un poquito despistado). Su origen es igualito que el de Batman: tres criminales mataron a sus padres y él juró vengar su muerte. Por cada chorizo muerto se bordaría en la camisa una calavera (de ahí su nombre). Una vez cumplida su venganza, decidió dedicar toda su vida a combatir el crimen terrenal y sobrenatural, acompañado de un chaval (Juanito o Perico, según el calendario escolar) y Cleofás, un sidekick sanchopanzanesco cómico con más miedo que un perrito chico.
"El Charro de las Calaveras" es una película de acción y terror, aunque la nota predominante es el humor, más que nada por los pauperrimos efectos especiales serie Z que posee el film debido seguramente a la falta de presupuesto. Las máscaras de los monstruos son bastante lamentables y algunos bichos (como el murciélago vampiro) se nota a la legua que son de cartón. Además, muchas de las escenas presuntamente nocturnas son rodadas a plena luz del día, sin disimulo ninguno. No obstante, como ocurre con toda buena película serie Z, estos pobres efectos especiales no perjudican al film, sino que, muy al contrario, le otorgan una atmósfera entrañable y cómplice que realzan su valor y salvan del olvido a una película bastante mediocre, convirtiéndola en una joya Kitsch para analizar, alabar y, sobretodo, disfrutar (porque la risa está garantizada).
La película se divide en tres capítulos con un esquema argumental idéntico:
A. Aparece el monstruo y se carga a un campesino que andaba por ahí.
B. Aparece el Charro de las Calaveras y empieza una investigación para descubrir el paradero del bicho (aunque en el fondo no sirve para nada, porque el monstruo irá a por él). En este segmento generalmente aparece una moza de buen ver.
C. Tras algún tiro e hostia bien dada, el Charro acaba con el monstruo (aunque a veces es por pura casualidad).
La galería de monstruos es curiosa a la par que lamentable. En primer lugar tenemos a un hombre lobo (denominado aquí "Lobo-humano") que antes de convertirse en bicho debe transformarse en un esqueleto. Su punto débil no es la plata, sino los precipicios, ya que si se cae por uno, se muere (al contrario que los seres humanos). Además, también harán acto de presencia una bruja desquiciada y un zombi chivato. El segundo monstruo es el Vampiro Siniestro, con una máscara del todo a 100. Tiene la habilidad de hipnotizar a mujeres jamonas y de convertirse en un murciélago de cartón sujetado por hilo de pescar. Y el último monstruo es el Jinete sin cabeza, un criminal que en su día fue asesinado por pendejo y que un profesor le cortó la cabeza para estudiar su cerebro y claro, el jinete pilló un mosqueo impresionante y se pasó los siglos vagando por el mundo buscando su melón (ya que el profesor metió la cabeza en una caja de zapatos y se lo entregó a sus herederos a modo de recuerdo).
En fin, "El Charro de las Calaveras" es una película muy entrañable y divertida, que hará las delicias de los más pequeños (por su atmósfera comiquera y porque, en su ingenuidad, se creerán los pésimos efectos especiales) y también gustará a los adultos, porque la película es para partirse la caja de risa.
Aquí os dejo el corrido del Charro de las Calaveras, interpretado por el Trío Calavera, cortesía de querrequerre1.


-

No hay comentarios:

Publicar un comentario