Candyman: el dominio de la mente

Candyman: el dominio de la mente (Candyman, 1992, USA)
Dirección: Bernard Rose
Guión: Bernard Rose basado en el relato "Lo prohibido" de Clive Barker, el de los cenobitas.
Música: Phillip Glass
Género: Leyendas urbanas y gore de buen gusto
Intérpretes: Mi idolatrada Virginia Madsen y Tony Todd (como el caramelero)
Sinopsis: Helen está preparando su tesis doctoral sobre las leyendas urbanas y queda fascinada con la de Candyman, un hombre de color negro con un garfio por mano que destripa a los gilipollas que se atreven a decir su nombre cinco veces delante de un espejo. Helen visita el barrio donde se supone que vive Candyman pero al final descubre que todo es un cuento chino de una banda de maleantes que aprovechan la leyenda para robar e delinquir. Satisfecha por haber destapado el fraude, Helen recibirá la visita del auténtico Candyman, el cual está un poco mosqueado porque ya nadie cree en él...

"Candyman: el dominio de la mente" es la mejor película de terror de los años 90, con dos cojones (lo cual, reconozco, no es difícil, porque en la década de los 90 la mayoría de películas de terror fueron espantosas en el mal sentido). Bernard Rose une de manera magistral el terror gótico de fantasmas con el gore brutal y de buen gusto para ofrecernos una maravilla del susto universal. La peli tiene de todo: thriller psicológico, destripamientos brutales, escenas impactantes, horror metafísico, atmósfera onírica, una música genial, un final puñetero y divertido y, sobre todo, tiene a mi queridísima Virginia Madsen, una pedazo de actriz que sabe dotar a su personaje de múltiples facetas. Además, mi Virginia es guapísima y hay una escena que si le das al pause le puedes ver un seno. El otro gran protagonista del flim es Tony Todd en su papel de Candyman, leyenda urbana creada por Clive Barker a raíz de otras dos leyendas, la del asesino del garfio (que mata a los jóvenes cachondos) y la de Verónica (o Mary Wroth), que se te aparece in situ cuando la mentas 3 veces delante del espejo. No obstante, la película otorga a la creación de Barker su condición étnica, ya que el relato trascurre en un barrio marginal inglés y Candyman era de color neutro.
Uno de los aspectos a destacar del film es esa ambigüedad en torno a los asesinatos de Candyman ¿existe realmente este espíritu vengador justiciero o la auténtica asesina es Helen, trastornada por la leyenda? Para gustos los colores.
Aunque la peli tiene un final cerrado, los productores, que no entienden de cultura, decidieron continuar la saga con dos secuelas más, "Candyman 2:" y "Candyman 3: el dia de los muertos", cada cual peor que la anterior, desprestigiando la primera parte de mala manera (aunque en la tercera sale Donna D´errico, ex-vigilante de la playa potente).
Aquí os dejo dos escenas cañeras de la película. A disfrutar. Y cuidado que salpica.


No hay comentarios:

Publicar un comentario